El pasado viernes y sábado se celebró el VII Congreso Escuelas que Aprenden en Lima bajo el título Hacia una escuela a medida. El desafío del aprendizaje personalizado.
Un evento –o encuentro– impulsado cada año por la Red EQAp, que va más allá de la teoría y que profundiza de tal manera en la reflexión del aprendizaje en el aula que logra trascender el salón de actos para aterrizar en lo que ocurre en el día a día de las escuelas. Y lo hace cada edición gracias a congregar a tantos profesionales que comparten sus experiencias y que tienen un mismo propósito: lograr ofrecer las máximas oportunidades de un aprendizaje real y duradero para mejorar la vida de cada estudiante.
Martin Varela, director de Formación de Trilema, arrancó el congreso con su conferencia que nos llevó a ser críticos en la era de la Inteligencia Artificial y a reflexionar en la idea de que personalizar el aprendizaje no es un trabajo individual, es tarea de toda la escuela y, según expuso Varela, está apoyada en tres focos fundamentales: la acción tutorial, la didáctica personalizadora y la autonomía y la autorregulación desde las funciones ejecutivas. “Solo así es posible personalizar”, aseguró.
Santiago Espinosa, rector del Colegio Sabio Caldas en Bogotá, compartió la experiencia que hace posible que su centro sea un caso extraordinario de oportunidades de éxito para unos estudiantes cuyo contexto pudiera vaticinar un fracaso seguro. Y aportó varias claves, entre las que destacó la idea de qué hacer como centro con más de mil alumnos para que cada uno de los estudiantes se sienta único. Hacer equipo, un cambio de la cultura de la evaluación y una priorización real de la educación del carácter son los pilares a tener en cuenta que resaltó como fundamentales para lograrlo. Porque para Espinosa, es importante poner antes el ‘estar bien’ “y luego llegan los buenos resultados académicos”.
La psicóloga peruana Emperatriz Torres, líder de la escuela inclusiva Skinner en Lima, tildó de didácticas y escuelas con pedagogías de tercera generación aquellas que se centran en la autonomía, la autorregulación y el bienestar del estudiante.
También formó parte del programa una mesa redonda con experiencias de cambios efectivos que contó con la presencia de Mario Torres, director Los Ángeles School (Costa Rica); Karla Rivas, directora Colegio San Agustín de Chiclayo (Perú); y Rosario Urviola, directora del Colegio Buen Pastor de Lima (Perú). Moderados por Sergio de Andrés, formador de Trilema, reflexionaron acerca de la idea de apostar por un modelo de escuela que, como el propio nombre del Congreso indica, busca hacerse a la medida de cada alumno. Abordaron las claves para lograr una realidad que se da en sus escuelas y que se replica en las EQAp de todo el mundo: el aumento de la demanda y la matrícula.
Teresa Puchades, directora de la Red Escuelas que Aprenden compartió los nuevos hitos a completar en este año que entra: una mejor estrategia de internacionalización y la consolidación del Bachillerato de Investigación y Emprendimiento (BIE) para las Escuelas de la Red.
El punto final del encuentro lo puso, como es habitual en cada Congreso, la foto final de grupo y la entrega de placas EQAp a los nuevos centros educativos que se suman a la familia Escuelas Que Aprenden.
La carga práctica de los Congresos EQAp, parte de su idiosincrasia.
Doce talleres impartidos por expertos y expertas en diferentes materias estuvieron abiertos a los asistentes. En ellos, se compartieron experiencias con evidencias visuales de profesores y profesoras que ya hacen realidad el cambio en sus escuelas.
Encontrarnos, compartir, aprender y crecer buscando respuestas y nuevas preguntas… Esos son los principales objetivos de esta cita internacional que el próximo febrero celebrará su octava edición por primera vez en Valencia, España.
Galería fotográfica por Janeth Cárdenas: